El imperio sasánida (224–651 d.C.) fue un centro cultural y político donde la escritura desempeñó un papel importante. La escritura de los sasánidas se desarrolló a partir de diversas tradiciones y se convirtió en una herramienta clave para la transmisión de conocimientos, administración y cultura.
La escritura en el territorio de Irán tiene raíces antiguas que se remontan a las escrituras sumeria y acadia. Sin embargo, con la llegada de los aqueménidas (558–330 a.C.) se introdujo un sistema cuneiforme. El imperio sasánida, que surgió a partir del reino parto, continuó las tradiciones de la escritura, adaptándolas a sus necesidades.
El imperio sasánida utilizó varios sistemas de escritura. Los principales fueron:
El pehlevi no es un sistema único, sino un grupo de tipografías relacionadas que se usaron para registrar el idioma persa en varios dialectos. El pehlevi era una abugida, donde las consonantes eran más prominentes que las vocales. Esto facilitó su adaptación a diversas necesidades, desde la literatura hasta documentos oficiales.
La sistematización del pehlevi ocurrió principalmente entre los siglos IV y VI. Durante este tiempo surgieron varios dialectos, como "chahar" y "shahrestani", que correspondían a las condiciones geográficas y sociales del imperio. El pehlevi se utilizaba tanto para textos religiosos como seculares, incluidos literatura, historia y tratados científicos.
Una de las áreas clave de aplicación de la escritura en el imperio sasánida fue la religión. El zoroastrismo, como religión estatal, estimuló la creación de una gran cantidad de textos, incluidos escrituras sagradas, comentarios y tratados. La "Avesta" —escritura sagrada del zoroastrismo— jugó un papel central en la cultura y la vida religiosa del imperio.
Una cantidad significativa de literatura religiosa fue traducida al pehlevi, lo que la hizo accesible a una audiencia más amplia. Los sacerdotes sasánidas participaron activamente en la creación y difusión de estos textos, lo que contribuyó a fortalecer el zoroastrismo.
El imperio sasánida se convirtió en un centro de logros científicos y culturales, donde la escritura se utilizó para registrar tratados filosóficos, médicos y astronómicos. Científicos como Burhan ibn Shahriyar hicieron importantes descubrimientos que fueron registrados en pehlevi.
La literatura de los sasánidas incluía tanto obras originales como traducciones. Durante este tiempo, se tradujeron obras de autores griegos y romanos, lo que fomentó el intercambio de conocimientos entre culturas. El desarrollo de la escritura contribuyó a crear una rica tradición literaria que incluía poesía y obras en prosa.
La escritura también desempeñó un papel importante en la administración del imperio. Documentos administrativos, incluidos edictos, estatutos y registros fiscales, se llevaban a cabo en pehlevi. Esto permitía gestionar de manera efectiva un vasto territorio y una población diversa, incluidos persas, árabes y otros grupos étnicos.
El registro en pehlevi contribuyó a la estandarización de los procesos administrativos, lo que facilitó la interacción entre las diferentes regiones del imperio. En este contexto, la escritura se convirtió en la base para mantener el poder estatal y el control.
Con la caída del imperio sasánida en el siglo VII y la llegada de los conquistadores árabes, el uso del pehlevi y otros sistemas de escritura comenzó a disminuir. Sin embargo, el legado de la escritura de los sasánidas sigue influyendo en las tradiciones de escritura modernas de Irán.
La escritura árabe, que sustituyó al pehlevi, tomó elementos característicos de la escritura de los sasánidas. Muchas obras científicas y literarias de esa época fueron traducidas al árabe, lo que contribuyó a la difusión del conocimiento.
La escritura del imperio sasánida fue una herramienta importante que contribuyó al desarrollo de la cultura, la ciencia y la religión. Reflejaba la naturaleza compleja y diversa del imperio, y su legado sigue vivo en el Irán moderno. El estudio de la escritura de los sasánidas permite comprender más profundamente su contribución al desarrollo de la civilización y la cultura del Oriente Medio.